Tenerife/ El secretario general de UGT en materia de Transportes, Juan Carlos Linares, amenazó hoy con llegar a los juzgados si continúan las políticas de apertura de partes, despidos y vulneración de los derechos de los representantes así como de los propios trabajadores del servicio, a la vez que criticó la política en materia de transportes tanto del Cabildo como de la dirección de Titsa y del Ayuntamiento de Santa Cruz, quienes “se niegan a dialogar con nosotros”.
Para Linares, casi cualquier acción sindical de la empresa, como comisiones de seguimiento o la negociación del convenio, “al final han tenido que hacerse a través de innumerables denuncias, ganando sentencias, pero siempre intentan incumplir las sentencias a nuestro favor”. En algunos casos se ha llegado a “amenazar y coaccionar a UGT” y, aseguran que, si desde la dirección de la empresa continúa la política de despidos, “habrá denuncias”.
Asimismo, repiten que desde el sindicato sólo tratan de reivindicar los derechos de los trabajadores puesto que “la norma general es la de no respetar el convenio” y recuerdan que a los trabajadores y usuarios del servicio de transporte de Titsa estos avances le han costado “innumerables huelgas”, pero “esos logros a lo largo de los años ahora nos los quieren quitar de un plumazo”.
Linares subraya que desde su postura lo único que buscan es “velar por un servicio digno, seguro y proteger los puestos de trabajo de nuestros compañeros”, a la vez que reitera que “no somos enemigos, sólo los representantes de los trabajadores”. Sin embargo, desde UGT denuncian que ni el Ayuntamiento de Santa Cruz, con el que tienen pendiente una reunión desde hace meses, ni el Cabildo de Tenerife, que “tiene una política de transporte errónea”, atienden sus peticiones de reunión. “No nos hacen ni caso”, reiteró Linares, quien insistió en que “sólo queremos defender lo que es justo para los trabajadores y afiliados”.
Insisten en que la dirección de la empresa ha contratado a directores “poco dialogantes” y que UGT sólo pide dejar el convenio como está y buscar otras alternativas, pero ellos “no quieren oír hablar del tema, sino que quieren reducir derechos y logros conseguidos a lo largo de los años”. De hecho, Linares asegura que desde que se están negociando los convenios llevan gastados 900.000 horas sindicales en la negociación, y que “no se ha avanzado nada en tres años de negociaciones”.
Por otro lado, el secretario general de UGT en materia de Transportes denunció que a los conductores de Titsa le llega una cantidad de partes y faltas “impresionantes”, tanto graves como muy graves, y que lo que la empresa quiere “verdaderamente es reducir costos sancionando a trabajadores, por lo que tendremos que unirnos todos y tomar cualquier tipo de acción legal para mitigar estos escritos, incluso acosos, ante los conductores en su mayor parte”.
Finalmente, otros aspectos reivindicados por UGT son solicitudes sin respuesta de un local para celebrar asambleas informativas para dar información a sus afiliados de cómo van las negociaciones de los dos convenios de la empresa o la inclusión de servicios jurídicos en defensa de los derechos de los trabajadores.
Asimismo, repiten que desde el sindicato sólo tratan de reivindicar los derechos de los trabajadores puesto que “la norma general es la de no respetar el convenio” y recuerdan que a los trabajadores y usuarios del servicio de transporte de Titsa estos avances le han costado “innumerables huelgas”, pero “esos logros a lo largo de los años ahora nos los quieren quitar de un plumazo”.
Linares subraya que desde su postura lo único que buscan es “velar por un servicio digno, seguro y proteger los puestos de trabajo de nuestros compañeros”, a la vez que reitera que “no somos enemigos, sólo los representantes de los trabajadores”. Sin embargo, desde UGT denuncian que ni el Ayuntamiento de Santa Cruz, con el que tienen pendiente una reunión desde hace meses, ni el Cabildo de Tenerife, que “tiene una política de transporte errónea”, atienden sus peticiones de reunión. “No nos hacen ni caso”, reiteró Linares, quien insistió en que “sólo queremos defender lo que es justo para los trabajadores y afiliados”.
Insisten en que la dirección de la empresa ha contratado a directores “poco dialogantes” y que UGT sólo pide dejar el convenio como está y buscar otras alternativas, pero ellos “no quieren oír hablar del tema, sino que quieren reducir derechos y logros conseguidos a lo largo de los años”. De hecho, Linares asegura que desde que se están negociando los convenios llevan gastados 900.000 horas sindicales en la negociación, y que “no se ha avanzado nada en tres años de negociaciones”.
Por otro lado, el secretario general de UGT en materia de Transportes denunció que a los conductores de Titsa le llega una cantidad de partes y faltas “impresionantes”, tanto graves como muy graves, y que lo que la empresa quiere “verdaderamente es reducir costos sancionando a trabajadores, por lo que tendremos que unirnos todos y tomar cualquier tipo de acción legal para mitigar estos escritos, incluso acosos, ante los conductores en su mayor parte”.
Finalmente, otros aspectos reivindicados por UGT son solicitudes sin respuesta de un local para celebrar asambleas informativas para dar información a sus afiliados de cómo van las negociaciones de los dos convenios de la empresa o la inclusión de servicios jurídicos en defensa de los derechos de los trabajadores.
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