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jueves, 22 de abril de 2010

Un rodeo de 24 kilómetros


Obras Públicas no descarta los cortes en el túnel de Tenoya por las obras de la fase IV de la circunvalación
RAÚL GIL
El barrio de Tenoya en peso se dispone a echarse a la calle para evitar que cierren el túnel del barrio y les dejen aislados del resto del municipio una vez comiencen las obras del nuevo paso subterráneo incluidas en la cuarta fase de la circunvalación a la capital grancanaria. Este corte les obligaría a dar un rodeo de 24 kilómetros cada vez que quieran ir hasta el ambulatorio o llevar a los chicos al instituto en Tamaraceite durante los ocho meses que durarían las obras.


La Consejería de Obras Públicas del Gobierno canario, que ejecuta la obra, asegura que no está previsto cerrar el viejo túnel aunque tampoco descarta que se produzcan cortes si la obra pone en peligro la seguridad de esta vía. Por su parte los vecinos aseguran que varios técnicos de la Consejería sí les han alertado de que es muy probable que haya que cerrar el túnel actual porque las vibraciones de las perforadoras, a apenas diez metros de distancia, afectarán gravemente a su estructura, de más de 150 años de antigüedad.


"Yo siento las vibraciones de una apisonadora de la obra que trabaja a cien metros de mi casa, imagine una perforadora al lado del túnel viejo", dijo Ramón Hernández, un vecino del barrio. "Con las últimas lluvias fuertes el túnel lo han cerrado varias veces así que con una obra como ésa nos esperamos lo peor", apuntó Maruca Santos, vicepresidenta de la asociación de vecinos La Encarnación de Tenoya.


Con este temor, los vecinos se han organizado en una Comisión por el Túnel que va a iniciar una campaña de movilizaciones en busca de una solución. "Lo que no queremos es esperar a que empiece la obra y corten el túnel sin darnos una alternativa antes, por eso pedimos al Gobierno que espere para empezar a perforar el nuevo paso [previsto en mayo] a que acabe el puente sobre el barranco de Tenoya, que sería nuestra única salida del barrio", explicó Domingo Macías.


Los vecinos creen viable que se acabe uno de los paneles de ese puente (que está a la mitad) y se habilite un acceso desde la actual carretera general para entrar y salir del barrio. La otra opción es desviarse hasta Cardones (en Arucas), bajar a la GC-2, entrar en Guanarteme y volver a coger la circunvalación para llegar hasta Tamaraceite. "Para ir al ambulatorio o a la oficina del distrito tenemos que ir a Tamaraceite, que está a menos de cuatro kilómetros, si nos hacen dar la vuelta serían 24 de ida y otras 24 de vuelta", señaló Francisco Santana. Los vecinos se manifestarán los días 5, 12 y 19 de mayo para pedir una solución a Obras Públicas.

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